martes, 24 de julio de 2012
Como un juguete sin niño
Como un océano sin agua, o un desierto sin arena.
Como un pajar sin aguja y sin el iluso que la busca.
Como un charco sin pisar un domingo antes de una cita.
Como un corazón sin latido. Como un juguete sin niño.
Así estoy yo cada vez que te doy un beso
y me despido de ti, y me quedo sonriendo
mientras lloro por dentro,
mientras grito a Dios en silencio
que invente el día en el que no te debas ir.
Como una guitarra sin cuerdas, o una meta sin carrera.
Como un cuento sin princesa, ni dragón, ni moraleja.
Como una noche sin abrazos, sin el roce de unos labios.
Como un sueño encarcelado. Como un perro sin su amo.
Así estoy yo cada vez que te doy un beso
y me despido de ti, y me quedo sonriendo
mientras lloro por dentro,
mientras grito a Dios en silencio
que invente el día en el que no te debas ir.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)